LIBÉLULAS

¿ Por qué me gustan las libélulas? No lo sé. Recuerdo ya de pequeño, cuando íbamos a bañarnos al río-tiempos de veranos en la aldea de los abuelos- nos sorprendían por su vuelo tranquilo, suave y rápido. Siempre me llamaron la atención sus enormes alas transparentes, su cuerpo larguirucho y su cabeza con unos ojos extraordinariamente grandes y sus antenas. Me quedaba observándolas y me parecían helicópteros naturales pero mucho más ágiles y versátiles y seguros que las máquinas humanas. Las encuentro bonitas. Y me hacen pensar en su mundo, en qué mundo viven y si su realidad es la misma que la nuestra. Siempre me dio que pensar en el mundo de los pequeños animales, en su corto tiempo de vida que a ellos les será tan largo-o tan corto- como el nuestro. A lo mejor el verdadero mundo está entre ese ecosistema que es el río, los musgos, las piedras húmedas, la brisa de las aguas…En los rincones del cauce del río, en la sombra del avellano, entre los recorridos del agua…Nosotros solo vemos su mundo desde el exterior…y quizá haya otro mundo del que poco sabemos. El otro día al leer una revista de naturaleza en la Biblioteca sobre las libélulas me vinieron estas ideas a la mente y pensé pues igual abro un post en el blog sobre ellas y aprovecho sus bellas imágenes para recrearnos un poco…
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