APOCALIPSIS

Primero la crisis económica, los eres, el paro; después el aborto y la conferencia episcopal, luego las células madre y la madre de Benedicto XVI;antes el avión de Spanair, el Yupolev que no es de Trillo y sí del general; la contaminación del agua y del aire; luego viene el de Afghanistán y nos amenaza a todos en casa; luego vienen los del norte de Corea y nos asustan cuando el Obama parecía que consensuaba con todos(y no como Rajoy); la capa de ozono que en el 2007 había mejorado resulta ahora que se vuelve a deteriorar; después va el Sporting y pierde en casa y fuera y Fernando Alonso que tampoco y que se marea y el Barcelona que lo llevaba de calle va el Raúl y la arma... Y el otro día voy al auditorio y me encuentro con el viejo profesor de filosofía de la facultad hecho un basilisco con el aborto y la unidad de España...el apocalipsis por todos los lados. Miro por ahí una revista de ciencia y leo que en Granada y cerca del Albaicín se celebra el primer Congreso o 1 ª Conferencia de Defensa Planetaria de IAA: La protección de la Tierra de asteroides. Se anuncia así:
Objetos cercanos a la Tierra (OCT) son en su mayoría asteroides - espacio de rocas con tamaños que oscilan entre unos pocos metros a varios kilómetros de diámetro. También hay algunos cometas, sólo el 1% del total de población de NEOs. Algunos de los objetos, conocida como "objetos potencialmente peligrosos" tienen órbitas que les traen muy cerca de la órbita de la Tierra.La probabilidad de impacto, en términos generales es muy baja, pero los efectos pueden ser extremadamente graves y no hay muchas pruebas de impacto de los últimos acontecimientos sobre la Tierra y también en la Luna.


Ayer surgen las noticias de Méjico lindo y querido: nos envía una gripe que en principio son sólo casos aislados que no es pandemia...En fín, menos mal que el Oviedín ganó seis cero...
Tengo que refugiarme en los libros, en los blogs y recordar aquí lo que una blogera, Velda Rae en su magnífico blog Fundida en Negro afirma:"...sólo me queda aferrarme a las fantasías sexuales para no caer en la más profunda de las depresiones existenciales. Quizás porque no cuestan dinero (a menos que entre ellas estén las de coleccionar gigolós o mantener un intercambio de fluidos en la Estación Espacial Internacional) y, en general, sólo requieren de decisión para hacerlas realidad, es el único apartado donde mi balance privado puede competir con el de Emilio Botín ya que es el único tipo de deseo sobre el que mi acción directa influye en el resultado, yo no renuncio a ellas, mientras la artritis me absuelva".
Bueno, pues eso, que esto está todo un poco apoc@líptico.