viernes, 4 de febrero de 2011

LA BICICLETA DE EINSTEIN


Aquí vemos a Einstein. Acaba de salir de una próxima escuela y ha entregado este texto que aquí reproducimos:
A veces se ve la escuela sencillamente como el instrumento que sirve para transferir una cierta cantidad máxima de conocimientos a la generación que se está formando. Pero esto no es correcto. El conocimiento es algo muerto; sin embargo, la escuela ha de preparar para la vida. Debería desarrollar en los individuos jóvenes aquellas cualidades y aptitudes que sean valiosas para el bienestar de la sociedad democrática. Pero esto no significa que se deba destruir la individualidad y que el individuo se convierta en un mero instrumento al servicio de la comunidad, como una abeja o una hormiga. Una comunidad de individuos estandarizados, sin originalidad ni objetivos personales, sería una comunidad empobrecida y sin posibilidades de desarrollo. Por el contrario, el objetivo debe ser la formación de individuos que actúen y piensen de manera independiente, pero vean, sin embargo, en el servicio a la comunidad su principal preocupación vital. […]

Pero, ¿qué tendríamos que hacer para alcanzar la situación ideal? ¿Tendríamos que intentar conseguir este objetivo moralizando? En absoluto. Las palabras son un sonido vacío, y se quedan en eso. El camino de la perdición siempre ha ido acompañado de palabras hipócritas que pretenden servir a un ideal. Pero las personalidades no se forman con lo que se oye y se dice, sino con el trabajo y la actividad.

Un mismo trabajo puede tener su origen en el temor y en la coacción, en el deseo ambicioso de autoridad y distinciones, o en el amor por el objeto de esa tarea y en un deseo de verdad y entendimiento, y puede surgir de esa divina curiosidad que siente todo niño sano, pero que a menudo pierde fuerza muy pronto. La influencia educativa que se ejerce sobre el alumno a través de la realización de un mismo trabajo puede ser muy diferente dependiendo de que en la base de ese trabajo haya miedo a sufrir daño, pasión egoísta o deseo de placer y satisfacción.

Además, nadie sostendrá que la dirección de la escuela y la actitud de los profesores no ejercen influencia sobre la formación de la base psicológica de los alumnos.

Pienso que lo peor para una escuela es ante todo trabajar con métodos basados en el temor, la obligación por la fuerza y la autoridad artificial. Tal procedimiento destruye los buenos sentimientos, la sinceridad y la confianza en sí mismos de los alumnos. Produce sujetos sumisos.

Tras entregarlo para que lo colocaran en el tablón de anuncios coge su bicicleta y se marcha tan contento a recorrer su espacio-tiempo.



El origen de este texto es un libro titulado Obra esencial de Einstein de José Manuel Sánchez Ron. Lo reproducido pertenece a una conferencia de Einstein nada menos que de 1936. Pero como se puede ver su significado se puede aplicar hoy perfectamente a nuestro sistema educativo. A destacar su descarte del autoritarismo y de la competitividad que hace del éxito el fin de nuestras vidas.

El texto completo lo tenemos en este pdf.
http://www.scribd.com/doc/41183070/Algunas-Ideas-Sobre-Educacion
Einstein y la educación/Blog Itaca.

No hay comentarios: