lunes, 3 de mayo de 2010

EL NIÑO FULBÉ:ÁFRICA ESA DESCONOCIDA



"...me volví por instinto para contemplar, una vez más, a mi madre.La vi llegar a la cima de la duna, el viento hacía flotar a su alrededor los faldones de su bubú y levantaba su leve velo de la cabeza. Habríase dicho una libélula a punto de emprender el vuelo. Poco a poco su elegante silueta desapareció detrás de la duna, como devorada por la arena. Con ella desaparecía Amkullel, y toda mi infancia..."
Así termina la historia del niño fulbé Amkullel. Poco antes había contemplado por última vez Sansanding, célebre ciudad marka donde mandaban los Cissé en tiempos del Imperio fulbé de Macina, y luego los Kuma en tiempos del Imperio tucoror de El Hadj Omar, antes de convertirse en el paraíso personal del "rey" Mademba Sy, el faraón de la Curva del Niger...".
Cerca está ese continente.A catorce kilómetros de nuestras costas gaditanas. Inmenso,conocido en parte y desconocido en mucho. Próximo y lejano en el conocimiento. Sus desiertos, sus ríos, descubrimientos prehistóricos, historia de grandes rasgos pero desconocida en muchas de sus etnias, pueblos, costumbres. Safaris turísticos, el oro de Sudáfrica, las luchas sempieternas de Sudán, Etiopía, Somalia, el Nilo Blanco y el Azul, pirámides, colonización, esclavitud y deportaciones... El libro El Niño Fulbé me ha permitido conocer un poco de las formas de vida desde la colonización hasta después de ésta; los fulbé o fulani...

Amkoullel, el pequeño fulbé (Amkoullel l’enfant peul)es el libro de las memorias de Amadou Hampaté Ba, un etnólogo y escritor maliense, referente de la conservación de la tradición oral y cultural de África Occidental. Trabajó en Dakar, París, Ouagadugú y Bamako y se formó para luego poner todo su empeño en generar un gran movimiento y escuela alrededor de las ciencias Humanas en Malí. Además, incrementó el interés no sólo por la búsqueda sino por la transcripción de la cultura africana.
Sobre Amadou Hampaté Ba no hay demasiada información en español. Destacó en muchos aspectos y, adelantado a su época, fue un referente en la conservación de la transmisión cultural africana. Generó multitud de archivos manuscritos que fueron fruto de una gran investigación en la tradición oral.
Hampaté Ba murió con 91 años en Abidjan, Costa de Marfil. Vivió cruentas batallas tribales en Malí, con madre y padre en diferentes bandos, comprendió, y lo destaca en su obra, la importancia de estar en medio y el absurdo de la confrontación entre hermanos
Siempre destacó en sus trabajos y después de varios oficios administrativos y de escribano, fue enviado al Instituto Francés del África Negra, situado en Senegal, gracias a uno de sus profesores más influyentes Théodore Monod.
A mitad de siglo consiguió una beca que le permitió ir a París y entrar en contacto con personajes africanistas que determinaron su obra. Entre ellos, destacó Marcel Griaule. Fundó, una década después, el Instituto de las Ciencias Humanas de Bamako, capital de su natal Malí.
Obtuvo el Gran Premio de la Literatura Negra en 1974 gracias a El extraño destino de Wangrin.
Hampaté Ba se define así:
"Yo soy un diplomado de la gran universidad de la palabra enseñada bajo la sombra de los baobabs"
.

El libro refleja cuatro características africanas: la memoria de la gente derivada de la tradición oral en la adqusición del conocimiento ya que no podían apoyarse en la escritura pues desde la infancia eran entrenados a observar, para mirar y escuchar de tal manera que los acontecimientos se inscribían en sus memorias-como dice el autor-como en cera virgen.
La poca precisión en la cronología típico de los relatos africanos. Cómo dice Hampaté Ba los relatos "reviven el pasado como una experiencia presente e introducen cierto desorden o caos en los que se encuentran cómodos, como peces en el mar donde las moléculas de agua se mezclan para formar un todo vivo".

No hay un África, no hay un hombre africano, no hay una tradición africana válida para todas las regiones ni todas las etnias. Frente a grandes constantes hay numerosas diferencias: los dioses, los símbolos religiosos, costumbres sociales varían de una región a otra, según las etnias y de un poblado a otro.
Y el cuarto elemento son los sueños y predicciones: no era raro ver a un hombre que llegaba a pie de una alejado poblado sólo para comunicar a alguien anuncios o instrucciones que había recibido sobre él en sueños; y luego regresaba con toda naturalidad, como un cartero...


África esa desconocida. Asignatura pendiente.

ENLACES:
Los fulbé o fulani
Etnias africanas
De África.

2 comentarios:

Naranco dijo...

Leí ese libro autobiográfico hace unas semanas y no me parece de gran valor. Su elemento más positivo es introducirnos en esa realidad múltiple que es África y que coincido contigo en tener muchos elementos culturales que desconocemos. Tenemos la visión de los europeos pero nos falta la de los propios africanos.

Anónimo dijo...

África es una realidad que estando cerca el desconocimiento de ella nos la hace lejana. Su cambiante identidad de países, de gobernantes, su inestabilidad, sus luchas tribales, sus diferentes religiones y culturas nos exige un acercamiento que hoy es más factible que nunca. Me gusta su blog por la presentación y el contenido.