Creatividad e imaginación. No hay duda de que el hombre crea belleza. Pero el problema es que esta belleza está ligada a la riqueza o a la capacidad adquisitiva. Cuando veo estas construcciones chocan dentro de mi dos sensibilidades: una, la creatividad como algo ilusionante y otra, la limitación económica al acceso y disfrute de ese bien.
O quedarse en el mundo de la ilusión o del sueño o escapar de la limitación y no posibilidad de acceso a unos bienes que se convierten en algo puramente especulativo.
Pero, bueno, alucinar o soñar casas para el 2018 se consigue aumentando el tamaño y compartiendo las imágenes...
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