sábado, 17 de septiembre de 2011

LA ESTAFA


Rosa María Artal, en su blog El Periscopio, el pasado 14 de septiembre, nos expone con claridad La gran estafa que se está incubando en Grecia y que puede extenderse al resto de los países de la UE. Como me parece que merece difusión colaboro incorporando su contenido en este post...
Los griegos andan viendo dramáticamente mermadas sus condiciones de vida porque su país necesita 110.000 millones de euros. Los portugueses se encuentran en parecida situación. Mientras tanto, los gobiernos de la UE han puesto a disposición de los bancos, según sus propias cifras, 3,7 billones de euros. Sólo en el primer período de la crisis, luego han ido añadiendo entregas. Sin ninguna condición o ajuste. En cambio a los ciudadanos cada vez se les piden más “sacrificios”. El economista Alberto Garzón lo “traduce”:

“Grecia ha reconocido que, en efecto, el resultado de aplicar los planes de ajuste (severos recortes de gasto público, privatizaciones, moderación salarial, etc.) ha sido recaudar 1.900 millones de euros menos y gastar 2.700 millones de euros más. Eso no recorta el déficit, lógicamente, sino que lo incrementa. Además, al déficit primario hay que sumarle la creciente suma de pagos que ha de acometer el país para ir pagando los intereses de una deuda que no tiene visos de dejar de aumentar. Ante esto, la “troika” ha pedido una vuelta de tuerca más: más recortes, más privatizaciones, más ajuste en definitiva. Y Grecia ha dicho que paren, que se baja”.

La prima de riesgo de Grecia –al igual que la de los otros países rescatados- está por las nubes, a más de 1.000 puntos en el caso de Grecia y cerca las de Portugal e Irlanda. Es decir, ha aumentado exponencialmente desde que… los secuestraron.

Alemania paga su deuda, que la tiene, e incluso superior a la española, por ejemplo (más del 80% Alemania, el 60% España) al 2%. A nosotros nos cobran, 5 ó 6%, y a los griegos al 18,50 (fue una de las últimas cifras pero están proponiendo intereses del 70%). Es “lógico”, los inversores tienen miedo a no poder cobrar.

Pero resulta que la deuda (instrumento económico utilizado por los gobiernos desde hace muchos años y sobre el que se dicen muchas mentiras intencionadas) se mantenía estable en unos 150 puntos de diferencial… ¿Hasta cuando? ¡Hasta la desregulación de los bancos! Un proceso iniciado en los años 80 y que culmina en 1999 ¿Y quién la decretó? El neoliberalismo por entonces en plena campaña de expansión. Fue su gran baza para consolidarse sin vuelta atrás.

Añadamos al emplasto, el poder omnímodo de las Agencias PRIVADAS de calificación norteamericanas, y unos estratégicos “instrumentos financieros” que permiten especular impunemente con países enteros, ciudadanos, y todo lo que se ponga por medio.

¿No saben todo esto los gobernantes que se reúnen tantas veces para expresar su “preocupación”? Naturalmente que sí. Pero...

NOTA: Lo para mí descorazonador es la actitud de los políticos tanto de nuestro país como de Europa. Dan la sensación de inseguridad, de no tener ideas claras, de estar confundidos y sin criterios... Lo mismo ocurre con los periodistas: están según el juego político o con las inseguridades de unos o las certezas y seguridades aparentes de otros pero todos, todos o mejor ninguno explica, aclara, razona, justifica razonadamente el porqué de sus propuestas y luego vamos y votamos...¿pero, qué votamos? La ideología que dicen encarnar pero que luego el "sistema" no les deja realizar. Todo esto nos deja la impresión de que algo nos ocultan, que algo hay por ahí que no explican y es lo que la tercera ley de Clark expresaba así:
“La tecnología suficientemente
avanzada, es indistinguible
de la magia”
y que adaptada a la realidad política y empresarial se convierte en
“La incompetencia suficientemente
avanzada, es indistinguible
de la mala voluntad”


No sé si es incompetencia(lo dudo tan generalizada y a tanto personal) y por tanto me inclino más bien por la falta de voluntad o mejor, por existir una mala voluntad ligada al propio interés, al deseo de medrar por encima de todos los criterios de una ciudadanía honrada,de una praxis política y social que está lejos,muy lejos de mirar por otra cosa que no sea el dios dinero...

Continuar la lectura aquí.
ENLACE: La ley de Clark

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo en que algo falla en la clase política pero no se puede generalizar: es posible que haya-como en todas las áreas de la vida- gente que sólo piensa en su medro personal pero también sé que hay gente honrada, políticos que se conforman con lo que les corresponde según el cargo que ostentan y que se sacrifican o simplemente trabajan y no "especulan"...Pero tengo la impresión que la clase política está sorprendida por los acontecimientos, quiero decir, que ni políticos ni economistas,etc, se han visto sorprendidos por la situación. Es cierto que, por ejemplo, en el campo de la construcción inmobiliaria se preveía una crisis, un parón, pero no de ese calibre que implicaría tanta crisis y también es cierto que la dinámica de eso que llamaban "inversión" se disparó pues se creía que el crecimiento y la economía funcionaban así. Pero todo tenía un límite que nadie supo ver...ni en Europa ni en EEUU.

Peñas Juntas dijo...

Buen post.Seguro que hay de todo. Incompetencia y mala voluntad. Los honrados también existen pero quizá sean los que tienen menos poder.